
Los nuevos avances y tratamientos permiten mejorar la calidad de vidas de quienes padecen esta enfermedad crónica.
La artrosis es una enfermedad para la que no se ha descubierto ninguna cura y puede llegar a ser dolorosa e incapacitante. Pese a ello y gracias a los avances en el mundo de la tecnología, hoy existen tratamientos que ayudan a reducir los síntomas y mejorar el estado de quien la padece.
Uno de estos tratamientos es la magnetoterapia que proporciona muchos beneficios para quienes tienen que convivir con una enfermedad crónica que afecta en gran medida su calidad de vida. Pero qué es la qué es la magnetoterapia.
Qué es la magnetoterapia
El tratamiento de magnetoterapia consiste en aplicar campos electromagnéticos de forma continua en el cuerpo. Estos campos estimulan el tejido celular y permiten volver a equilibrar el organismo cuando se ha visto afectado por una lesión o una enfermedad, como es el caso de la artrosis.
En muchos centros de rehabilitación y fisioterapia se ha podido comprobar que la magnetoterapia ayuda a reducir el dolor, la inflamación de huesos y músculos, dos de los principales síntomas de la artrosis. También existen otras aplicaciones de la magnetoterapia relacionadas con este tipo de problemas.
¿Qué tipos de artrosis se pueden tratar con magnetoterapia?
Existen estudios que demuestran que los pacientes con artrosis mejoran de forma significativa sus síntomas cuando se someten a sesiones de magnetoterapia. En un principio se comenzó a usar para la artrosis de espalda y los dolores lumbares, pero se ha comprobado que este tratamiento es muy eficaz para todos los tipos de artrosis debido a que ayuda a regenerar los tejidos y por tanto, frena de un modo significativo los efectos de la enfermedad.
Además, al ser un tratamiento no invasivo, es posible aplicarlo en todos los estadíos de la enfermedad, aunque cuanto antes se comience a utilizar mejores resultados se podrán conseguir.
Cómo se aplica el tratamiento de magnetoterapia
Como hemos mencionado, en muchos centros de fisioterapia y rehabilitación se están empleando máquinas de magnetoterapia para tratar a pacientes con artrosis. Esto puede generar la sensación de que usar una de estas máquinas es complicado, pero nada más lejos de la realidad. De hecho, se puede aplicar el tratamiento en casa de forma individual, con los mismos resultados de mejora.
El equipo de magnetoterapia portátil La Magneto es muy fácil de utilizar e intuitivo, además de incluir una gran cantidad de programas predefinidos, con los que no hay más que colocar las bandas en las zonas a tratar, escoger el problema de salud, en este caso la artrosis, y poner el dispositivo en marcha. Una gran pantalla en color facilita las tareas, por lo que incluso pacientes con edad avanzada pueden utilizarlo sin necesidad de que alguien les ayude.
Para que los resultados sean los adecuados, las sesiones de magnetoterapia deben ser diarias, con una duración de al menos 2 horas. Dependiendo del grado de la enfermedad, pueden hacer falta varios ciclos de sesiones a lo largo del año, de unas 20 sesiones aproximadamente.
Ventajas de la magnetoterapia para tratar la artrosis
Teniendo en cuenta que la artrosis es una enfermedad de la que se desconocen sus causas y que no hay una cura para acabar con ella, los aparatos de magnetoterapia I-Tech se han convertido en una de las mejores alternativas para paliar los efectos de la enfermedad y reducir su avance, en la medida de lo posible.
Además, la magnetoterapia es ventajosa porque no es invasiva, es indolora y se puede aplicar el tratamiento en el hogar de forma muy sencilla. Sus efectos analgésicos y antiinflamatorios reducen el dolor, mejorando la calidad de vida de la persona que padece la enfermedad, de tal manera que recuperará las ganas de hacer cosas que consideraba imposibles.